Alfredo
Teo, con su sensibilidad, su profesionalidad y su entrañable sentido del humor, consigue que las sesiones sean, además de un momento de aprendizaje, un auténtico regalo. En su cabina te ayuda a liberar, mediante la voz, sonidos y emociones que ni siquiera sospechabas tener. Para mí ha sido todo un hallazgo.
Ángeles
Siempre me observaba a mi misma y sabía cómo entraba en la cabina, pero nunca podía sospechar qué podría ocurrir dentro y, menos aún, cómo iba a salir de allí. Ésa era una de tantas sensaciones que tenía cada vez que me ponía en sus manos. Teo es muy humano, tiene muchísima sensibilidad y un gran sentido del humor que no me dejó indiferente. La sutileza con la que me observaba y me guiaba hacía que realmente confiara en él, en la posibilidad de sanar y crecer a través del sonido. Volveré a retomar las sesiones en cuanto aparezca por el Sur de nuevo. Infinitas Gracias, Teo.
Carmen
Se llama Teo, pero no tiene ninguna relación con Dios, aunque hace milagros de esta índole. Es el cuidador por excelencia de tus cuerdas vocales. Las mima y las acaricia con su piano hasta que adquieren la fuerza suficiente para plantearte cantar ópera como soprano o tenor. Lo conocí por recomendación. Después de varias tediosas sesiones de logopedia con diversos profesionales aburridos y triviales, buscaba algo menos mecánico y con lo que me pudiese implicar más.
Cuando llegué me pareció una persona afable, que me recordaba a los clown de teatro. Le faltaba la nariz roja (algún día se la regalaré). Cuando empiezas su terapia, te conduce a una pequeña habitación, que es el recinto sagrado de la voz, hasta el punto de que te pide que te descalces para pisar ese lugar místico. Él lo llama la cabina mágica. Primero te regalará una almohada muy cuca a la que le pondrá tu nombre, para tumbarte después en una camilla donde dispararás sonidos al son de su piano.
Algunos días te pide que cantes alguna de tus canciones preferidas (le taladré con Rosana hasta la saciedad), las graba para que después veas como modulas tu voz. Y por si esto fuera poco, intenta explicarte la conexión indiscutible que hay entre tu voz y tu estado emocional en cada circunstancia. Al mes, ya lo consideras como uno más de tu familia. Y es que Teo no es sólo un logopeda en el sentido estricto de la palabra, sino que también se convertirá en tu verdadero compañero del camino mientras dura tu dolencia. Un logopeda como éste no podría llamarse de otra manera.
Ciriaco
Nunca estaré suficientemente agradecido a mi amiga Lucy por pasarme la referencia de Teo en respuesta a mi impulso de empezar a cantar. Gracias a Teo se me ha abierto una puerta de desarrollo personal en el ámbito de la expresión y nunca hubiera imaginado que al atravesar esa puerta me fuera a encontrar con un espacio tan amplio de disfrute. Mi hora semanal con Teo es sagrada, tiene que pasar algo muy grave para que la tenga que anular, y tengo que decir que Teo es un gran profesional que lo hace todo fácil, con una gran sensibilidad y sentido del humor.
Clara
Hay tanto que decir de Teo que no sé por dónde empezar. Fue mi salvavidas emocional, pudo subirme la autoestima cuando más lo necesitaba uniéndolo al placer que me daba usar mi voz. Me ayudó mucho a expresarme, a emocionarme, a sentir pasión por cantar y fue la mejor terapia que ningún psicólogo me pudo aconsejar. Fue mi hermana la que me hizo uno de los mejores regalos de mi vida: dos meses con clases con Teo. Y siguieron y siguieron y siguieron, a veces se interrumpieron por motivos ajenos a Teo, pero siempre fue, es, y seguro que será, un gran compañero, un gran maestro y un amigo; no todos pueden decir eso de alguien que antes sólo era tu profesor. Un besazo, Teo. Te debo tanto de alma que no sé cómo te lo devolveré.
Emilio
Cuando buscaba un profesor que diera clases de canto en Sevilla tuve la fortuna de encontrar a Teo, que es un gran profesional con una amplia experiencia en su sector y sobre todo es una persona con un trato humano excelente. Su enseñanza es personal, directa y con la flexibilidad necesaria para adaptarse a nuestras necesidades, deseos y circunstancias personales. Su trabajo es excepcional, se empeña en potenciar al máximo las fortalezas y virtudes de cada uno.
Generosa
Llevo tomando clases con Teo desde hace muchos años y me encantan. Las clases siempre son muy amenas. Aprendes sin darte cuenta y no sólo eso; siempre salgo con la autoestima más alta y con una sonrisa en los labios. Recomiendo estas clases no sólo para las personas que quieran cantar, también para las que necesitan hablar en público, proyectar la voz etc…una clase con Teo siempre es una estupenda experiencia.
Manuel
Sin duda, uno de mis grandes descubrimientos del 2017. Quizás porque di con lo que estaba buscando desde hacía tiempo. Con Teo estoy consiguiendo ampliar los registros de mi voz con la finalidad de usarla empleando todo su potencial. Teo, como acompañante, es una persona sensible, respetuosa y con gran sentido del humor. En todo momento he sentido que me ofrecía un espacio para explorar, reír, reflexionar y, como no, cantar. Quien no sólo pretenda trabajar su voz, sino que además esté dispuesto a romper bloqueos emocionales para facilitar su vida está en el sitio indicado.
Sandra
Me encanta cantar, me encantan mis clases de canto con Teo, me divierto mucho con este maestro, que no sólo te enseña, te dirige, te quita los miedos y sube tu autoestima, es que además tiene un sentido del humor enorme. No puedo estar más feliz e ilusionada con mis clases de canto, porque, aunque no me dedique a esta maravillosa profesión, completa mi vida y derrocho mis sentimientos a través de mi voz. Gracias, Teo, eres todo un artista.
Yedra
Las clases de Teo están llenas de energía, emoción, simpatía, humor y optimismo. Es un gran profesional de la voz. Con él he aprendido que tod@s podemos cantar y aprender de nuestras emociones a través de la voz. Y, sobre todo, de sus clases siempre sales más contenta de lo que entraste y llena de confianza. Y eso es todo un regalo. Graciaaaas, Teo!!! Un honor y un placer haber sido tu alumna.